Tareas  de Octubre

Iván M. Prado Rodríguez

Acabamos de iniciar el mes del otoño por excelencia, lo que significa que a pesar de que aún puede haber algún día de sol y calor, lo que van a predominar seguramente a partir de ahora son las lluvias y las temperaturas típicas de esta estación. Los tonos rojos, anaranjados, amarillos y marrones se irán adueñando de las hojas de los árboles y arbustos de hoja caduca, creando paisajes efímeros de gran belleza. Por lo que sí el tiempo acompaña, no dudéis en programar alguna pequeña salida para disfrutar de este colorido espectáculo estacional.

El trabajo en el jardín ya no será tan intenso ahora como en los últimos meses, pero no por ello debemos descuidarlo. Entre las tareas que no debemos dejar de realizar, una de las más importantes será la de revisar el sistema de riego, en el caso de que dispongamos de él. Es importante contar con un programa de riego para el otoño en el que la cantidad y frecuencia se reduzcan con respecto al verano, pues las necesidades de agua de las plantas serán cada vez más pequeñas. Además, el aumento de las lluvias durante el otoño acompañará esta disminución, y dependiendo del volumen de precipitaciones incluso podríamos prescindir del riego por completo. La cantidad de agua también dependerá de la composición de plantas de nuestro jardín: por ejemplo, el césped podría regarse 2-3 veces a la semana, mientras que los arbustos precisarían un riego cada 7-10 días, y plantas tipo cactus y/o crasas cada 20-25 días.

Otro dato importante a tener en cuenta es que con la entrada en octubre también nos acercamos a sufrir las primeras heladas y por ello tendremos que estar debidamente preparados. No debemos de olvidarnos de tener a mano algún tipo de protector para proteger aquellas plantas que tengamos plantadas en el jardín o terraza y sean sensibles a las heladas. Además, prepararemos un acolchado, “mulching”, o cubierta protectora con restos de siegas, paja seca, hojas secas, o corteza triturada, con el fin de proteger del frío a las raíces de las plantas y así conservar mejor el calor del suelo.

Entramos en una buena época para poder plantar árboles ornamentales, árboles frutales, coníferas, arbustos y rosales. En el proceso del plantado debemos limpiar la maleza a su alrededor y acondicionar un poco el suelo, para reducir la competencia  por el agua y los nutrientes. Si vamos a realizar un abonado debemos tener cuidado de no utilizar estiércol poco hecho, porque las raíces podrían quemarse. También nos encontramos en el momento de ir plantando los bulbos que florecerán en primavera, como los tulipanes, jacintos, crocus y narcisos entre otros.

A partir de este mes podemos empezar a tomarnos en serio el llevar a cabo los trasplantes que necesitemos, principalmente con las especies de hoja caduca, ya que para las de hoja perenne es mejor esperar a estar en invierno.

En cuanto al césped, todavía estamos a tiempo de sembrarlo en el jardín, tanto para nueva formación como para resembrar o recuperar zonas dañadas o con faltas. Si quisiéramos tener césped a partir del próximo mes ya tendríamos que utilizar tepe o de lo contrario esperar hasta casi llegar a la primavera.

Podemos escarificar el césped pasando la máquina escarificadora y airearlo mediante el pinchado con horca o con un rulo de púas. Sería interesante aplicar un fungicida al césped, preferiblemente después de segar: de este modo servirá para tratar o prevenir las enfermedades de hongos más comunes que suelen aparecer a lo largo de esta época.