Iván M. Prado Rodríguez

El Geranio antimosquitos

Junto con el verano, llegan los mosquitos y sus temibles y molestas picaduras. Aunque en el mercado podemos encontrar distintas maneras de combatirlos, hoy hablaremos de una forma natural y decorativa: el geranio antimosquitos, un geranio de una agradable  fragancia, que puede resultar muy útil contra estos molestos insectos.

El Pelargonium citrosum, se caracteriza por poseer una agradable e intenso olor a limón. Esta peculiaridad se debe a su contenido en citronelol, una esencia que ahuyenta a los mosquitos. Para conseguir un efecto correcto en evitar la presencia de mosquitos, lo importante es situar varias plantas alrededor de los lugares que frecuentemos, a modo de barrera.

Se trata de una planta herbácea, de hoja perenne, hojas grandes, aterciopeladas, palmeadas, lobuladas, y provistas de un largo peciolo. Sus flores son pequeñas y de cinco pétalos, y aparecen desde marzo hasta septiembre dispuestas en ramilletes en lo alto de un pedúnculo.

Originario de Sudáfrica, el geranio antimosquitos necesita calor para sobrevivir por lo que su cultivo en casa es posible siempre que dispongan de mucha luz. Se adapta bien a cualquier terreno, pero debemos asegurarle los nutrientes adecuados. Requiere de riego regular y frecuente en primavera y verano, disminuyendo la intensidad en otoño e invierno. A la hora de regarlos es importante no mojar ni pulverizar las hojas. Para que florezcan abundantemente, debemos situarlos en lugares soleados y ventilados. El abonado se realizará cada 15 días, con un abono líquido indicado para plantas de flor.